miércoles, 22 de febrero de 2017

Autodefensa vinculada a La Familia Michoacana desaparece a médico veterinario en San Miguel Totolapan

Un médico veterinario de San Miguel Totolapan fue levantado y desaparecido por miembros del Movimiento por la Paz, cuando se transportaba en un autobús entre Arcelia y San Miguel Totolapan, denunciaron pobladores.

De acuerdo con la denuncia, el hecho se registró la primera semana de enero, cuando la víctima se trasladaba en un autobús entre las cabeceras municipales de Arcelia y San Miguel Totolapan.

Ahí la unidad fue abordada por un grupo de hombres con armas largas y cortas identificados como miembros de La Familia Michoacana y del supuesto grupo de autodefensa "Movimiento por la Paz", quienes bajaron al joven del autobús y se lo llevaron con rumbo desconocido.

Según un informe el veterinario fue localizado asesinado al día siguiente en el municipio de San Miguel Totolapan, pero el reporte oficial es que continúa desaparecido.

El grupo armado "Movimiento por la paz" surgió el 12 de diciembre de 2016 en San Miguel Totolapan como un brazo armado de La Familia Michoacana, organización liderada por los hermanos Johnny Hurtado Olascoaga "El Pez" y José Alfredo Hurtado Olascoaga "La Fresa", quienes son responsables de la ola de violencia en la Tierra Caliente del estado de Guerrero y del Estado de México.

Los líderes de este grupo armado en San Miguel Totolapan, que intentan presentarse ante la población local como un grupo de autodefensa, están identificados como Conrado Mendoza Alameda, "El Ope", hijo del alcalde de San Miguel Totolapan, Juan Mendoza Acosta, "El Memelas"; Marcos Mondragón Mendoza, actual tesorero municipal; Isauro de Paz Duque, "El Ingeniero"; Josué López, "El Colima" y Wilbert Rodríguez, "El 80".

De acuerdo con una denuncia interpuesta esta semana en Chilpancingo por una mujer desplazada por el grupo criminal, los delincuentes actúan junto a la Policía Ministerial de Arcelia, quienes irrumpen conjuntamente en comunidades de los municipios de San Miguel Totolapan y Ajuchitlán del Progreso de donde se llevan a pobladores, incluidas mujeres y niños que no vuelven a aparecer, mientras que las familias son intimidadas, sitiadas y obligadas a desplazarse por el grupo armado.

A pesar de que los atropellos se cometen a ojos vista y a la luz del día los delincuentes cuentan con la anuencia del Ejército Mexicano y de la Fuerza Estatal que se encuentran destacamentados en San Miguel Totolapan denunció la mujer, de quienes dijo no hacen nada por evitarlo, por lo que demandó la intervención de las autoridades del estado de Guerrero frente al grupo de la delincuencia organizada que intenta legitimarse como grupo social y que en dos meses ha desaparecido a decenas de personas y desplazado a varias comunidades en el valle del río Balsas.

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