Autoridades informaron del cierre de al menos un consultorio del IMSS en Arcelia, Guerrero, por amenazas y extorsiones de delincuentes pertenecientes a La Familia Michoacana, la organización pandilleril que mantiente el control de extorsiones, secuestros y asesinatos en este municipio enclavado en la región de Tierra Caliente.
El consultorio cerró sus puertas luego de que el personal médico recibiera llamadas amenazando con secuestrarlos si no pagaban una cuota de 10 mil pesos. El personal detalló que al menos otro consultorio en ese municipio atraviesa por esa situación, lo que se agrava porque no cuentan con vigilancia.
En 2015, en una manifestación a nivel estado del personal médico que trabaja en Guerrero en contra de la violencia, los manifestantes expresaron que "desde hace mucho tiempo nos hemos visto afectados por asesinatos y levantones. (Los delincuentes) se han metido a nuestros centros de trabajo y se han llevado a nuestros compañeros, o los han secuestrado en las carreteras”, sin que la situación haya mejorado.
De acuerdo con información publicada en La Jornada Guerrero, el cual retomaba datos de una encuesta de Deloitte, los centros de salud del SES, IMSS e ISSSTE en Guerrero operan en medio del desabasto y la saturación, por lo que el cierre de clínicas y consultorios a causa de la violencia agravan el problema, provocando que al disminuir los centros abiertos aumenten el desabasto, la saturación y los tiempos de espera para consultas, afectando principalmente a los sectores más vulnerables, quienes se ven obligados a recurrir a consultorios privados, farmacias o tiendas de autoservicio para atender sus problemas de salud, teniendo que desembolsar de su ya de por sí mermada economía.
Pese a que los responsables de la violencia, los secuestros y las extorsiones en Arcelia están plenamente identificados, las autoridades de los tres niveles no han hecho nada para remediarlo.
Los delincuentes detrás de la ola de violencia son identificados como "El 8", "El 80" o "El Búho", jefe de plaza de La Familia Michoacana en Arcelia, y Teodoro Hernández Mojica, "El Cóndor", quien es el encargado directo de los secuestros y las extorsiones y al mismo tiempo es miembro del grupo musical "Súper banda Perla Plateada", dedicado a hacer autoapología de la organización criminal. Ambos actúan bajo las órdenes de los hermanos Johnny y José Alfredo Hurtado Olascoaga.
Con información de Quadratín Guerrero y La Jornada
